Reseña #11: Fangirl, de Rainbow Rowell



Cath y Wren son gemelas idénticas, y hasta hace poco lo hacían absolutamente todo juntas. Ahora están a la universidad. Wren le ha dejado claro que no piensa compartir habitación con ella. Para Wren es una oportunidad única de empezar de cero y conocer gente. Para Cath no es tan fácil. Es terriblemente tímida. Su único mundo es ser fan de Simon Snow, donde ella se siente a gusto, donde siempre sabe exactamente qué decir y donde puede escribir un romance mucho más intenso que cualquier cosa que haya experimentado en la vida real. Sin Wren, Cath se siente completamente sola, fuera de su zona de confort. Tiene una compañera de cuarto antipática, siempre acompañada de su atractivo novio, un profesor de escritura que piensa que el fan fiction es el fin del mundo civilizado, un guapo compañero de clase, que sólo quiere hablar de palabras. Y además, no puede dejar de preocuparse por su padre, que es amoroso y frágil y nunca ha estado realmente solo. Ahora Cath tiene que decidir si está dispuesta a abrir su corazón a los nuevos amigos y a las nuevas experiencias, y se está dando cuenta de que hay mucho más que aprender sobre el amor de lo que nunca creyó posible.
La escritura de Rainbow Rowell en Eleanor y Park me dejó tan buenas sensaciones que, sin duda, quise poner en mis manos más libros de esta autora. La sinopsis de Fangirl me llamó mucho la atención y, puesto que para muchos lectores ésta es la historia que más recomiendan de la autora, no dudé en darle una oportunidad.

Si algo he sacado en claro de las historias de Rowell es que los comienzos no son lo suyo. Al igual que Eleanor y Park, Fangirl se me hizo un poco pesado durante los primeros capítulos, como si a la autora le costara un poco arrancar. Eso sí, una vez cogido el ritmo, la historia mejoró bastante.

Se nos presenta a Cath, el personaje principal, una chica de 18 años que tiene que enfrentarse a un gran cambio en su vida como es el paso del instituto a la universidad. La peculiaridad de Cath es que, a diferencia de su hermana Wren, prefiere quedarse en casa (o en su defecto en su habitación de la residencia de estudiantes) sentada delante de su ordenador escribiendo historias: Fanfics de Simon Snow, un equivalente al Harry Potter de nuestro mundo. Esto desde un principio va a crear una brecha en la relación de ambas hermanas que se irá desarrollando conforme avanza la historia.

La vida real era algo que pasaba por su visión periférica.

Wren, uno de los personajes secundarios, es la hermana gemela de Cath y, como ya he dicho anteriormente, es todo lo contrario a ella. Está decidida a exprimir por completo la vida universitaria yendo a fiestas, emborrachándose... lo que la lleva a perder el control. Esto hace que Cath se preocupe mucho por ella y es cuando la autora empieza a mostrarnos sus miedos. Cuando empieza a revelarnos los problemas familiares, la situación de su padre, que de repente siente que pasa a un segundo plano en sus vidas, la aparición de su madre... Me gustó mucho encontrarme con eso. Sobre todo que no sólo tratara de su vida allí en la universidad, sino también lo que supone para los padres que sus hijos sigan adelante.

Si algo me encanta de esta autora es que es capaz de describir muy bien los sentimientos, te hace sentir verdaderamente lo que sus personajes están viviendo. Algo muy notable es la relación entre ambas hermanas, cómo Cath se siente inferior a su hermana por no ser tan sociable o por pensar que todo el mundo prefiere a su hermana antes que a ella. Cath se siente la sombra de su hermana. Y acostumbrada a eso, tiene miedo de tener que enfrentarse sola al mundo, a la gente. Cath es un personaje que me ha encantado porque me he sentido muy identificada con ella. Alguien que prefiere vivir entre páginas, entre los mundos de internet, donde puede ser ella misma sin que la juzguen, antes que tener que socializar en la vida real.

- Es solo que... ¿rendirse no está permitido algunas veces?¿No está bien decir: esto realmente me hace daño, así que voy a dejar de intentarlo?
- Establece un precedente peligroso.
- ¿Sobre evitar el dolor?
- Sobre evitar la vida. 

Sin duda para mi, el personaje de Levi llega para romper los esquemas de Cath. Levi es sin duda el personaje más bueno que he podido leer nunca. Atento, comprensivo, siempre intentando hacer feliz a los demás y tener una sonrisa en la cara. Sin duda una persona que todos querríamos tener cerca. Me gustó mucho como interfiere en la vida de Cath y cómo no trata de cambiarla, sino que la apoya.

La relación que se da en este libro me pareció de lo más creíble y natural. Rowell se tomó su tiempo para desarrollarla, al compás del ritmo de Cath para hacer frente a esas nuevas situaciones. La verdad es que incluso me dejó con ganas de más.

No creo que sea buena en esto. Chico-chica. Persona-persona. No confío en nadie. Nadie. Y cuanto más me importa alguien, más segura estoy de que se van cansar de mi y a largarse.

La razón por la que no le doy la máxima puntuación es por la historia paralela que interrumpía la trama principal. Vale que leer sobre Simon Snow nos acercaba más a la historia o a lo que Cath podía sentir al respecto, pero para mí era un estorbo. La trama principal me interesaba muchísimo, y encontrarme cada cierto tiempo con esos párrafos me cortaban la historia. No consiguió interesarme lo suficiente.

Aun así no tengo dudas de que Fangirl me ha llegado al corazón. Una historia muy fresca, con una trama sencilla, una protagonista muy bien formada  y con la que me he sentido identificada. Creo que cualquiera que haya sido muy fan de algo se habrá sentido Cath en la historia, quizás la habrá comprendido mejor. Y eso es algo que me ha gustado recordar. En mi caso, Harry Potter fue mi Simon Snow y, aunque no escribía fanfics, escribía otras historias con otros personajes en ese mundo que Rowling creó. Y me desvivía esperando un libro nuevo, una película nueva. Es algo que recuerdo con mucho cariño. Y también las inseguridades de Cath, sentir que no encajas en el mundo real, sentir que es más fácil vivir en otras historias que en la tuya propia. Por eso se ha ganado un lugar especial en mis estanterías.

Es solo… todo. Hay demasiada gente. Y no encajo. No sé cómo ser. Nada en lo que soy buena es la clase de cosas que importan allí. Ser inteligente no importa, ni ser buena con las palabras. Y cuando esas cosas sí importan, es solo porque las personas quieran algo de mí. No porque me quieran. 

Así que después de terminar con esta lectura, solo puedo recomendaros que le deis una oportunidad a esta autora, porque para mí, se está convirtiendo en una de mis favoritas. Ya estoy deseando tener entre mis manos otra de sus obras.
   

Reseña #10: El mundo azul: ama tu caos, de Albert Espinosa

Ama tu propio caos, aquello que te hace único. “Cuando alguien no te entienda, dile: no importa, ama mi caos. El caos es lo que te hace diferente, lo que la gente no entiende de ti o lo que desea que cambies, cuando en realidad tienes que amarlo. Y no solo eso, después de amarlo, tienes que agrandarlo.”

El mundo azul es la nueva novela de Albert Espinosa; una historia que enlaza con El mundo amarillo y Pulseras rojas y con la que cierra una trilogía de colores que hablan de vida, de lucha y de muerte. Espinosa nos introduce en una narración de aventuras y emociones sobre un grupo de jóvenes que se enfrentan a un gran reto: rebelarse contra un mundo que trata de ordenar su caos.
A través de cinco personajes, una isla y una búsqueda incesante por vivir, Espinosa vuelve a introducirnos en su particular universo con una historia que se desarrolla en un mundo onírico y fantástico, con un arranque contundente y un desenlace esperanzador y lleno de luz.

“Sí, arriésgate”. Esa debería ser siempre la respuesta a cualquier pregunta. 

El mundo azul ha sido mi primera toma de contacto con este autor, el cual me ha dado muy buena impresión. Básicamente la historia es una especie de cuento largo, con una gran reflexión. He leído muchos libros de autoayuda y a veces pueden hacerse un poco pesados, mientras que el método de este autor de insertarlo dentro de una historia bastante sencilla y con un pequeño toque de fantasía, me parece una estrategia muy acertada. Precisamente por eso decidí leer este libro.

La historia se centra en los últimos días de un chaval de 17 años que, en vez de aferrarse desesperadamente y sin promesa a los cuidados paliativos que pudiera recibir en un hospital, decide ir a un lugar donde, muy lejos de los médicos, despedirá su vida. Nuestro protagonista no se espera para nada lo que va a encontrar y va a enfrentarse a lo largo del libro a lo que supone la aceptación de la muerte, y también, la aceptación de uno mismo.

El caos es la personalidad sin juicio ni moral. Si amas tu caos, acabarás descubriendo que las respuestas jamás te las dará este mundo, sino que están dentro de ti. No existe la felicidad, tan solo existe ser feliz cada día y para ello es fundamental amar tu caos.

Me parece una propuesta muy valiente por parte de este autor, tratar con tanta cercanía el tema de la muerte. Pocos libros hay centrados en esta temática donde sea tratada con tanta naturalidad, pues esto provoca que sea visto desde una perspectiva de crecimiento personal, incluso con un punto de positivismo, con el que no esperaba encontrarme. 

Esperaba un libro muy dramático y para nada ha sido así. Albert es un autor que ha sabido plasmar muy bien estos sentimientos de forma que, aunque te encuentres en una situación contraria al tema, empatices con el protagonista y extrapoles las enseñanzas a otros ámbitos de la vida. 
Por lo que he estado leyendo, las experiencias personales de este autor han influido en todo esto, por lo cual me parece admirable ser capaz de hablar de un tema tan delicado, como doloroso, pues hay recuerdos en nuestra memoria que preferimos dejar enterrados antes que hablar de ellos.

Las dudas no resueltas son los miedos no aceptados.

En conclusión, me he encontrado con una historia muy fácil de leer, que se me ha quedado incluso corta, y que me ha hecho reflexionar, no solo acerca de la muerte, sino también de todo el camino que constituye la vida. Son muchas las frases que he guardado para el recuerdo de este libro, por haber movido algo dentro de mi. Me uno a todas esas personas que recomiendan esta lectura y, sin duda alguna, pronto volveré a poner en mis manos otros libros de este autor.
 


Press to Play #1: Winter winds, de Mumford & Sons


¡Hola a todos! Llevaba un tiempo queriendo meter algo de música al blog y me voy a animar con una nueva sección, Press to Play, donde compartiré con vosotros una canción que me guste, que probablemente será de mis obsesiones del momento (porque cuando me da por una, me da...), e irá acompañada de su letra y traducción (cuando sea preciso). Me ocuparé de hacer la traducción de la canción, por lo que pido disculpas si cometo algún error.

Para abrir la sección he elegido la canción "Winter winds" del grupo inglés Mumford and Sons. Me gusta mucho este estilillo folk que se traen e indudablemente es uno de mis grupos favoritos.

Reseña #9: Leal, de Veronica Roth

 La sociedad dividida en facciones en la que antes creía Tris Prior ha quedado hecha pedazos, fracturada por la violencia y las luchas de poder, y marcada por la traición. Así que, cuando tiene la oportunidad de explorar el mundo más allá de los límites que siempre ha conocido, Tris está más que dispuesta. Puede que, al otro lado de la valla, Tobías y ella descubran una nueva vida juntos más sencilla, libre de mentiras, lealtades confusas y recuerdos dolorosos. Sin embargo, la nueva realidad de Tris es aún más inquietante que la que ha dejado atrás. Lo que creían haber descubierto deja de tener sentido. Surgen verdades explosivas que hacen cambiar de opinión a sus seres queridos.
 ¡Hola a todos! Por fin, después de unas semanas bastante intensas, he terminado esta trilogía en la que me adentré hará más o menos un mes. Puedo decir orgullosa que la he terminado sin tragarme ningún spoiler, aunque ya yo me venía oliendo el final.

Pues bien, comenzamos. Leal rompe con la trama de los libros anteriores, se centra en otro problema, con otros personajes. Si bien esto no me ha parecido mal, me parece que cuestiones que se planteaban en los libros anteriores no se terminaron de resolver o se resolvieron de una forma un tanto forzada.

La dinámica del libro me ha gustado mucho. Es verdad que ha tenido muchas páginas en las que aparentemente no pasaba nada, pero eso ha servido para conocer mejor a los personajes y para resolver muchas de las cuestiones que se planteaban al final de Insurgente, pues como ya he dicho antes, la trama se centra en una nueva revelación. Tenía muchas ganas de saber más, ya que la idea que proponía la autora me resultaba muy interesante, y me ha sabido corresponder. Me ha resultado agradable que, aunque fuera un libro con menos acción que los anteriores, haya mantenido el ritmo, no dejando que te desenganches de la lectura.

Respecto a los protagonistas, Tris y Tobías. En este caso, la historia se narra desde ambos puntos de vista, algo que ya de por sí me dio qué pensar. Pero me gustó mucho, pues me parece que completa mucho la historia y fue muy interesante poder conocer la perspectiva de Tobías. Aunque en esta ocasión, le tocó a Tobías ser el que mete la pata, se mete en líos, se equivoca y se arrepiente. Algo que me pareció un poco repetitivo por parte de la autora. 

Por otra parte, en este libro, si bien siguen peleando como si no hubiera mañana, los veo más centrados, veo que han crecido un poco y vuelven a recordarme a Tris y Tobías de Divergente. Aunque es cierto, que a veces sus peleas me desquiciaban, en este libro han tenido más sentido y, además, me gustó mucho que no se reflejara a la típica pareja perfecta de todos los libros. Porque, en la vida real, las parejas pelean, a veces muchísimo, y eso no significa que no se quieran. Esa dosis de realidad rompe con el tipo de relaciones a las que nos tienen acostumbrados. Bien, Veronica.


Me enamoré de él. Pero no me quedo con él por inercia, como si no hubiera nada más a mi disposición. Me quedo con él porque así lo decido todos los días al despertarme, todos los días que nos peleamos, nos mentimos o nos decepcionamos. Lo elijo a él una y otra vez, y él me elige a mi.


Poco más hemos podido conocer de los personajes secundarios de esta novela, que han aparecido muy poco. La verdad es que tampoco pueda decir que les haya cogido mucho cariño. Así que sí, aunque cierto suceso me pareciera injusto y triste... no le di muchas vueltas, sin más. Sin embargo, la madre de Tris tiene mucho protagonismo en este libro y toda la trama que la rodea me ha parecido muy interesante y he quedado satisfecha.

A partir de este momento, voy a empezar a soltar spoilers, porque me parece necesario para poder hablar de ciertos temas. Así que si no queréis leerlos saltaros esta parte.



Toda la teoría que envuelve a los experimentos y el Departamento de Bienestar Genético, cómo se resuelve la cuestión de los Divergentes, la existencia de personas con Genes Defectuosos y Genes Puros. De verdad, no me lo esperaba y me fascinó. Me encantó ese giro en la trama.

Verónica empezó proponiendo una base que me parecía muy currada y con un gran trasfondo. Me mantuvo en vilo durante los dos primeros libros, sólo dándome datos con cuentagotas, y soltó la bomba final en la que todo cobraba sentido. En serio, maravillada.

Solo me queda hablar del final, del polémico final. Para empezar, desde que vi que en Leal se unía Tobías a la narración, pensé directamente: Tris muere. Sí, no sé, me pareció lo más obvio, quizás demasiado obvio, y por eso mantuve la esperanza de estar equivocándome hasta el final

Pero no. Tris muere, y encima de una forma que me pareció muy poco heroica. Me parecía clarísimo que Tris no iba a dejar que su hermano, por muy malo que hubiera sido, muriera. Porque no, Tris no es así. Sabía que al final iba a ser ella la que entrara en el laboratorio, sabía que se enfrentaría al suero de la muerte, y sabía que sobreviviría a él. Algo que me hacía mantener la esperanza de que el final no fuera trágico. Pero no, no me esperaba que David estuviera allí. Y me pareció muy forzado. Igual que me pareció muy injusto para una gran protagonista como es Tris, morir por un par de disparos aleatorios. VENGA YA. Ha pasado por cosas peores.

En fin, después de todo eso yo seguía teniendo la esperanza de que se iba a salvar, que la autora solo quería meternos el miedo en el cuerpo. Pero no.

Por otro lado, el tema de la resolución de la guerra en Chicago. Que en un párrafo estuviera todo resuelto. Vale que esa trama Veronica ya la había dejado un poco de lado, pero no sé, un poco más de emoción después de todo lo que han liado, ¿no?

Y Tobias. AY DIOS MÍO. Ahí ya estaba yo pensando "prepara los pañuelos porque esto va a ser duro". Pero no. No sé si es que me había frustrado tanto cómo había muerto, si no me lo terminaba de creer, si era la normalidad con la que la autora se había cargado a su protagonista, o que no le puso la suficiente emoción. Pero no solté una lágrima. Y eso en mi es raro.

Pero eso no significa que no me partiera el corazón las últimas páginas del libro. La desolación de Tobías cuando quiere olvidarlo todo, Christina dándole un rapapolvo en honor de Tris. Y la despedida. El último adiós a las cenizas de Tris cuando Tobías se precipita con ellas en la tirolina. Es una escena que, aunque me pareció en cierto modo divertida e irónica, me encantó que pusiera el broche final a la trilogía. Tobías luchando contra uno de sus mayores miedos junto a ella.

Y aunque para mí, el final estuviera teñido de injusticia y de drama, me parece un gran final, muy diferente a lo que nos tienen acostumbrados. La autora, que tanto nos instaba a ser valientes, lo fue al proponer este cierre.


FIN DE LOS SPOILERS



En definitiva, tanto este último libro como la trilogía en general, profundizan mucho en los sentimientos de las personas. Es una oda al sacrificio por quienes se ama, por el dolor, por la lucha y por seguir adelante. Si algo me ha quedado claro es que en esta trilogía no hay maquillaje, las cosas son como son, en las guerras se sufre, en el amor se sufre, en la vida se sufre. Y lo importante es saber enfrentarse a ello. 


A veces [la valentía] no es más que apretar los dientes por el dolor y por el trabajo de cada día, y así caminar poco a poco hacia una vida mejor.


Ha estado muy lejos de ser una novela en la que todo es perfecto, con un final perfecto donde todos viven felices por siempre jamás. Y probablemente por eso, me ha llegado hondo. La he disfrutado, he sufrido con ella, he sentido alivio, rabia, esperanza y empatía con unos personajes que no han dejado de crecer y luchar. 

Sin más, tanto este libro, como la trilogía Divergente en conjunto, me parece una historia que merece la oportunidad de ser leída. Yo, por mi parte, me quedo con mi crisis existencial de fin de saga y digiriendo todo lo que acabo de leer.